La brisa se estira suave y atrapa el miedo
lo envuelve en ella y se lo lleva lejos.
Respiro hondo esa brisa fresca que me arranca el miedo
me sacude entera y me besa luego.
Me embriago de ese tiempo extinto que la brisa carga,
ese tiempo viejo que nos lava el alma.
Me duermo con el viento suave que acaricia el alba
y me despierto pronto si la brisa calla.
Envuelta en la niebla la brisa se queda callada
entonces mi respiración se escapa con prisa, asustada.
Maricel 19/06/2019