A veces como hoy, una suave brisa
eriza mis cabellos y mis pensamientos huyen del silencio,
ese silencio que sabe de gritos frente al espejo…
…a veces, cuando siento que el silencio está regresando,
me paro frente a mi espejo roto y le grito; sonríete a ti.
Debemos arrancarle las sabanas
de un tirón a la vida, intentar que las lunas pasadas,
olviden pronto el camino que nos regresa recuerdos.
A veces tan solo caminemos bajo la lluvia,
para que diluya cada lágrima, salgamos a la vida,
encontremos el mar que disuelva las tristezas,
y que el tiempo envuelva las cicatrices que nos entierra en el alma.
A veces eso hacemos, devorados por los recuerdos,
corremos a encontrar nuevos, para demorar lo más que podamos
las tormentas que la vida nos impondrá,
mientras, nos lamemos las heridas